martes, 28 de diciembre de 2004

LA ULTIMA REDENCIÓN

Me miró triste
Y yo le dije:
ven y sálvame
estas totalmente loca y eres mía.
Abrázame
salva mi alma
de las pirañas nocturnas.
Siéntame
En la inmensidad eterna de la noche.
Sálvame
Infinita y Solemne...
Sálvame
yo pálido soñador de santos muertos...
... lujuriosa y solenme
sálvame de la ultima desolación.
Tómame en tu aliento
remóntame en la inmensidad.
abrázate conmigo a la misma tumba.