lunes, 21 de marzo de 2011

REALIDAD O MITO?

Soy una criatura de la noche que vaga sin fin en busca de alimento, no es un cuento de terror, lucho a muerte cada noche con mi bestia interior. No me busques, puedo estar en cualquier lado, vengo de un mundo que nunca has imaginado.

Vivo guardando un secreto, algo terrible hay en mi corazón. Solo la luna y algunos que han muerto conocen mi autentico yo.

Corro desnudo en un bosque, no temo a nada, pisando la hierba fresca, sintiendo el viento en la cara, no necesito la luz, ni cazar con armas, mi olfato es extraordinario, mi vista esta agudizada. Busco una presa, y fácilmente puedo sentir su miedo escuchando el latido que se acelera dentro de su pecho, tengo los músculos fuertes para saltar y con solo una dentellada desgarro una yugular.

Puedo saciar mi apetito con un venado, no creas en las leyendas pues tengo parte de humano, he convivido con ellos durante siglos, también he tenido amigos incluso me he enamorado. Mas quien descubre mi enigma es despedazado, su raza es la mas dañina, los años me han enseñado que el miedo es dañino y he de matar al hombre asustado.

Esta es mi calamidad, yo solo en la eternidad, en nadie puedo confiar pues están deseando agarrarme y cazarme, han puesto precio a la sangre de mi raza.

Sufro con este secreto, no me conoces del todo mi amor. Lo mismo que me hace eterno me aleja de ti y no soporto el dolor. Tengo el instinto asesino del cazador, mi estirpe es la del mayor depredador. Soy un pura sangre del reino licántropo, a voluntad me transformo, tengo el control.

Pero si muerdo tu carne y quedas con vida te advierto que es doloroso el veneno de mi saliva; es distinto nacer con los genes a ser convertida, un monstruo dominaría tu ser y tu matarías. A tus seres queridos devorarías…

Arde un demonio en mi pues se que tengo que elegir entre verte envejecer hasta morir, despedirme y huir o convertirte en una bestia y hacerte sufrir.

Son criaturas de la noche, son letales, inmortales. Cazadores implacables, si te encuentran tiembla y teme por tu vida.