viernes, 15 de diciembre de 2006

SOLO UN SUEÑO

Tuve un sueño
Soñé que por un instante eras mía
Soné que tus labios ansiaban probar los míos
Soñé que tu cuerpo ansiaba mi sangre
Soñé que tu mente quería conocer mi secreto
Soñé que querías amarme.
Pero desperté
Y entonces sólo me quedó la soledad
el amargo sabor de boca que sigue al sueño
Y por supuesto, la terrible certidumbre de tu indiferencia.